sábado, 29 de mayo de 2010

una semana cargada de emociones

Así fue la semana pasada para mí. Es que fue el cumpleaños 99 de mi abuela y es imposible no emocionarse recordando retazos de su vida que componen, indudablemente, la mía.
Mi abuela Carmen es una persona muy dulce, de una gran sabiduría, con una firmeza que sorprende en su cuerpecito frágil. Nunca pesó más de 48 kg. y siempre soñó con ser robusta y fuerte.
Es que, esta hija de inmigrantes españoles, gallegos para más datos, nació en la Argentina del 1911.
 Sus padres habían tenído una situación de holgura económica allá en su tierra y por esas cosas del destino llegaron a la provincia de Buenos Aires, más precisamente a Coronel Segui, un pequeño poblado que ni sé si figura en los mapas.
Traían baúles con tacitas de porcelana, medias de seda y otros lujos innecesarios, mejor diría sin sentido, en ese pueblo, crecido como albergue de los peones que trabajaban para los estancieros.
Allí, cuando tenía 15 años llegó un forastero, que después resultó ser mi abuelo.
 Un hombre diez años mayor que ella.
Hijo de español e india araucana, de esta mezcla ancestral nació un hombre taciturno, con el rostro como tallado en piedra; no demostraba sensibilidades, no porque no las tuviera, sino porque su concepto de "Hombre" no le permitía sensiblerías.
Indudablemente tuvieron una vida difícil, sin embargo  mi abuela siempre tuvo una mirada esperanzadora. Tiene poesía en el alma y eso hace que en lugar de ver desolación y tristeza, pinte la vida desde una paleta de colores brillantes.
Entiéndase bien, no es la negación de los problemas o la mirada hueca que desconoce realidades, es la esperanza, la seguridad en que todo siempre puede ser mejor.
Es el amor, digo, a ese hombre que fue su hombre y que hace más de 43 años  ha partido, sin embargo ella lo recuerda y se emociona al nombrarlo.
Quisiera que Dios me dé la posibilidad de vivir un Amor así.
Que Dios me dé su fuerza y tenacidad, su amor a la poesía y a los animalitos.
Quisiera parecerme a ella en esas pequeñas grandes cosas
Seguramente, los míos, han de decir si esto se ha cumplido o no.
En tanto, le dejo mi beso, esta vez virtual, que la acompaña, siempre

1 comentario:

Cooperativa Electrica dijo...

hola, lei tu nota sobre tu abuela... haces referencia a que sus padres vinieron desde Europa a Bs As, precisamente a Coronel Segui... yo te escribo desde Coronel Seguí, me gustaria si es que podes aportar algun dato, me lo hagas llegar al blog... estamos armando la historia de Segui.
Desde ya muchisimas gracias!!! Mariana (correo elect: coopsegui@intercal.com.ar)